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Panorama |
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Diversos
cambios sociales y demográficos que se han
producido en la llamada sociedad occidental en los
últimas décadas han teniendo una repercusión
directa sobre la cantidad creciente de productos
envasados.
Así
la incorporación de la mujer al campo laboral, las
agrupaciones familiares que se limitan a la célula
familiar básica y el menor número de miembros de
ésta, como consecuencia de la drástica disminución
del número de hijos por pareja, marca una clara
tendencia a comprar un número cada vez mayor de
productos envasados, pero en cantidades cada vez más
pequeñas.
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Tendencias
positivas |
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Las
empresas son conscientes de que frente a las
limitaciones encontradas existen diferentes
beneficios, técnicos, económicos, legales,
medioambientales y comerciales que pueden
aprovechar.
Los
sectores empresariales son cada vez más dinámicos
en el campo de la gestión ambiental y más en los años
habiendo contribuido significativamente a ello tanto
una mayor concienciación de los empresarios como
factores legales externos como la Ley11/1997, la
Norma ISO 14001 y la Directiva 96/61.
Se
va materializando lentamente el concepto de
Desarrollo Sostenible y en algunos concursos público
se fijan como elementos de valoración criterios
relacionados con la certificación ambiental.
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Tendencias
negativas |
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Los
planes y programas de residuos de todas las
administraciones no respetan el principio de jerarquía
fijado por la Unión Europea, ya que fomentan la
eliminación en vertedero frente a la minimización
y el reciclado.
Parece
necesario que las estrategias de planificación de
residuos deben incorporar planes de educación y
sensibilización, no de carácter puntual, sino de
forma permanente a lo largo de la duración del
plan.
Por
otra parte, los nuevos planes deben incidir en la
necesidad de establecer mecanismos de medida y
control eficaces, que permitan garantizar el
cumplimiento de los objetivos planteados, así como
la completa clarificación de las fuentes de
financiación.
La
nueva Directiva de vertederos exige condiciones
ambientales que, prácticamente, el 80% de los
vertederos españoles no podrán cumplir, por lo
tanto, parece necesario que las administraciones
articulen programas específicos para la restauración
o sellado de estas estructuras, para así lograr la
adecuación ambiental que prescribe la norma europea
y minimizar los riesgos sobre el medio ambiente y la
salud pública.
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El
Código de Conducta Ambiental en el sector |
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Viene
definido por un conjunto principios estratégicos de
gestión medioambiental relacionados con los envases
y residuos de envases que son la garantía de la
mejora continua en el comportamiento y la gestión
medioambiental de las actividades y servicios
prestados por el sector empresarial de los envases y
que acepta el objetivo marcado por la Ley de reducir
los residuos de envases.
Los
principios en torno a los cuales se articularía el
Código de Conducta Ambiental de este sector son,
entre otros, los siguientes:
-
Cumplimiento
de los requisitos legislativos actuales y
previsibles
-
Coherencia
con las medidas en prevención de envases, a
través del conocimiento de aquellas que
realmente puedan ser aplicadas desde un punto de
visto de viabilidad técnica, legislativa,
ambiental y económica.
-
Comunicación
y programas de formación acerca de datos
relevantes
-
Vinculación
de la política sectorial con la estrategia
empresarial
-
Desarrollo
sostenible a largo plazo, atendiendo a la
protección y la mejora del medio ambiente.
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Objetivos
del Plan Nacional de Residuos Urbanos |
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Entre
los objetivos que fija el Plan Nacional de Residuos
Urbanos relacionados con los residuos de envases
cabe destacar:
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Implantación
de la recogida selectiva, antes del 31 de
diciembre de 2006, en todos los núcleos urbanos
de más de 1.000 habitantes.
-
Instalación
de contenedores, antes del 2006, para la
recogida selectiva de vidrio, envases ligeros y
papel/carbón en todos los municipios.
Objetivos
mínimos de valorización y reciclaje de los
residuos de envases:
Objetivos
de reciclaje para los distintos materiales de los
residuos de envases:
-
Para
el papel/carbón, pasar de un 60% en el 2001 a
un 75% en el 2006
-
Para
el vidrio, pasar de un 50% en el 2001 a un 75%
en el 2006
-
Para
los plásticos, pasar de un 25% en el 2001 a un
40% en el 2006
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Para
el acero, pasar de un 50% en el 2001 a un 90% en
el 2006
-
Para
el aluminio, pasar de un 35% en el 2001 a un 90%
en el 2006
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Para
la madera, pasar de un 25% en el 2001 a un 50%
en el 2006
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